Son lugares habitados ocasionalmente donde las cosas reposan intactas hasta la llegada de un agente inmobiliario que enseña la casa a un posible inquilino o comprador.
El resto del tiempo, la luz escasa hace que los elementos estructurales cedan paso a bodegones en penumbra o asestados por un puñal de luz, transmitiendo soledad absoluta en un entorno tranquilo, que va acumulando polvo mientras pasan los días. La cámara y su particular manera de interpretar la luz, busca un entorno liviano, sin obstáculos visuales que le permitan aliviar la vista cansada. Jaquecosa y soñolienta encuentra en estas exposiciones su refugio. Un espacio libre de interferencias humanas, por fin se encuentra a solas con sus limitaciones.
Este proyecto crece de forma paralela a mi trabajo como fotógrafa de interiorismo.
Se ha llevado a cabo en casas de campo y de ciudad a lo largo de la geografía española desde el 2012 hasta hoy.
Impresa en papel de algodón
Tirada: cada obra del proyecto: 6+2 P.A.
Tamaño: 40x60cm